Eduardo Estrella, candidato presidencial DxC. |
Al dirigirse a cientos
de jóvenes en un emotivo acto, lleno de fervor patriótico, celebrado en
Dajabón, a orillas del río Masacre, pidió castigo para los corruptos y delincuentes. “Frente al
tráfico de armas, drogas e indocumentados por la frontera, frente a la
delincuencia y el robo, es hora de que imperen el orden y la ley, castigando a los que se equivoquen, porque
no podemos permitir que se ponga en juego la seguridad
del pueblo y el Estado dominicano, castigaremos a todos sin importar si es
delincuente de la calle, alto funcionario o militar, sin importar su apellido o
nivel social, ¡se acabará el relajo!”, precisó.
Señaló que esta
población está “jarta” y cansada de promesas y diálogos, deplorando los pocos recursos que se destinan
a la zona fronteriza, mientras las autoridades solo aparecen “cuando les sobra
algo, como de pena y así lo han venido haciendo los que nos han gobernado en
los últimos 15 años”.
“Estamos convencidos
que el mejor gobierno, es aquel en que los funcionarios valen por lo que rinden
al pueblo con el sudor de su frente y no por lo que obtienen para si, con el
filo de sus uñas”, indicó.
El líder político recordó que en su gestión como ministro de Obras
Publicas, se construyeron escuelas, acueductos, hospitales, asentamientos
campesinos, viviendas, caminos vecinales, carreteras y asfaltado de las calles
de todos los municipios de la franja divisoria.
“Priorizaremos la
terminación de las carreteras Montecristi-Dajabon, en realizar proyectos
habitacionales en cada una de las comunidades de la frontera, en la construcción de la presa de Amina para
controlar las inundaciones de las tierras de la línea noroeste e incorporar
nuevas zonas al riego, la construcción de la presa de Joca en las Matas de
Farfán para irrigar miles de tareas en los municipios de Bánica y Pedro
Santana, la tan anhelada presa de Monte Grande que beneficiará a la región del
Lago Enriquillo, las cuales además producirán energía eléctrica barata”,
“Es tiempo de que nuestros jóvenes marchen
afirmando con entusiasmo ¡yo soy la bandera dominicana!, tal y como lo hizo el
valeroso Francisco del Rosario Sánchez, como expresión inequívoca del más sacro
patriotismo y de la convicción para transformar esta nación”, concluyó.
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